Con visitas a centros comerciales de Soyapango, Ilopango y Apopa, el aspirante a la presidencia por ARENA, Rodrigo Ávila, entró a la recta final de este proceso electoral en el que él vaticina buenos resultados.
Sin agenda firme y decidiendo en el camino los lugares a visitar, el candidato siguió la rutina de fotografías instantáneas, entrega de camisetas y abrazos a los que se acercaban a saludarlo. Al mediodía, Ávila fue obligado a detenerse cuando uno de sus zapatos se dañó, cobrando la cuenta de las giras por varias zonas del país.
Con zapato sin suela en mano y en calcetines a medio centro comercial, el presidenciable se decidió a repararlo con “pega loca” y continuó su visita a distintos establecimientos. Minutos después del incidente, con la incomodidad de arrastrar el pie para que la suela no se despegara, decidió comprar un nuevo par de zapatos.
Intercalando la agenda de visitas con reuniones privadas, el candidato terminó la gira en una maquila de Apopa, donde decenas de mujeres que salían de sus labores recibieron los mismos regalos de quienes minutos antes se aglomeraban en el pericentro de la misma ciudad. Después de las visitas, Ávila se dirigió a una cena de recaudación de fondos.
El vicepresidenciable
Arturo Zablah, por su parte, solo tuvo una aparición pública ayer. Vía microonda de un canal de televisión, reiteró que no se utilizarán fondos de pensiones para el programa “Vida nueva”; rechazó la probabilidad de fraude en la elección del próximo domingo, y condenó los últimos hechos de violencia. Para hoy, las agendas de ambos siguen separadas y prevén unirse en el radiomitin para el cierre de la campaña en las instalaciones del COENA.
Sin agenda firme y decidiendo en el camino los lugares a visitar, el candidato siguió la rutina de fotografías instantáneas, entrega de camisetas y abrazos a los que se acercaban a saludarlo. Al mediodía, Ávila fue obligado a detenerse cuando uno de sus zapatos se dañó, cobrando la cuenta de las giras por varias zonas del país.
Con zapato sin suela en mano y en calcetines a medio centro comercial, el presidenciable se decidió a repararlo con “pega loca” y continuó su visita a distintos establecimientos. Minutos después del incidente, con la incomodidad de arrastrar el pie para que la suela no se despegara, decidió comprar un nuevo par de zapatos.
Intercalando la agenda de visitas con reuniones privadas, el candidato terminó la gira en una maquila de Apopa, donde decenas de mujeres que salían de sus labores recibieron los mismos regalos de quienes minutos antes se aglomeraban en el pericentro de la misma ciudad. Después de las visitas, Ávila se dirigió a una cena de recaudación de fondos.
El vicepresidenciable
Arturo Zablah, por su parte, solo tuvo una aparición pública ayer. Vía microonda de un canal de televisión, reiteró que no se utilizarán fondos de pensiones para el programa “Vida nueva”; rechazó la probabilidad de fraude en la elección del próximo domingo, y condenó los últimos hechos de violencia. Para hoy, las agendas de ambos siguen separadas y prevén unirse en el radiomitin para el cierre de la campaña en las instalaciones del COENA.
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